En casi 40 años de Serie 3, nunca antes BMW había contemplado una carrocería como la que ahora estrena en su berlina media. Una nueva forma para hacer del Serie 3 GT un modelo que resta frente al Serie 3 berlina o Touring alguna dosis menos de deportividad aportando en mayor medida un trato a los ocupantes más exquisito. Tanto, que no sería extraño que llegara a canibalizar en determinados casos al Serie 5 dada su brillante amplitud interior, sobre todo en lo que a las plazas traseras se refiere, con un amplio espacio longitudinal que asegura un mayor confort a sus ocupantes. Además, podrán adaptar su posición al contar con diferentes regulaciones de la inclinación del respaldo en 15 pasos, que permite por ello también variar la capacidad de carga del maletero. El amplio portón de apertura eléctrica da paso a un maletero que llega en condiciones estándar hasta los 520 litros, 25 más que el Touring.
Al acceder a su interior, llama la atención de entrada la ausencia de marcos en las ventanillas de las puertas y, al sentarnos, una postura de conducción más elevada que en las otras dos versiones, casi 6 centímetros más alta. Un breve recorrido por las carreteras de la sierra madrileña nos ha dejado claro que, ante todo, el Serie GT aporta mucho confort. Sus reacciones no son lógicamente tan vivas como las del berlina —es más largo, ancho y alto y cuenta con mayor distancia entre ejes—, pero aún así permite disfrutar de su conducción en carreteras muy viradas. Las suspensiones contienen bien el balanceo, pero su configuración apunta claramente hacia una evidente mejoria en el confort de bacheo. Los largos viajes serán sin duda cortos desplazamientos dado el brillante confort interior que se respira. Tres adultos se acomodan detrás sin problemas de espacio y la amortiguación regulable garantiza un trato a los ocupantes de berlina de gama alta.
A igualdad de motor, el nuevo Serie 3 Gran Turismo cuesta 1.200 euros más que el Touring y 4.000 euros más que el sedán de cuatro puertas. Su puesta a la venta es este mismo mes de junio, reforzando la Serie 3 con una versión menos deportiva en su configuración y que apunta hacia un confort de marcha por encima del que ofrecen sus hermanos de gama. La gama de motores inicial contempla tres variantes de gasolina y dos Diesel de inicio, similares a los que ya se montan en la berlina, aunque debido al mayor peso de la nueva carrocería y su mayor resistencia al aire, los consumos resultan algo superiores.
Asi, por ejemplo, en el caso de las versiones Diesel 320d de 184 CV, el Gran Turismo presenta unos consumos un 9 por ciento superiores y unas prestaciones ligeramente inferiores. El Diesel más básico, el 318d de 143 CV cumple con mucha suficiencia, aunque para quienes perfieran un Diesel de muy alto rendimiento, a partir de julio llegará el 325d Biturbo de 218 CV.
En gasolina, 320i, 328i y 335i son la oferta inicial, muy escalonada y todos ellos provistos de doble turbocompresor, con potencias entre 184 y 306 CV. Suavidad y refinamiento son algunas de sus mejores virtudes, junto a un rendimiento muy elevado fruto de unas curvas de par marcadas por sus elevados valores a bajo régimen.
GAMA Y PRECIOS desde:
318d 143 CV: 36.900 euros
320d 184 CV: 40.600 euros
320i 184 CV: 38.500 euros
328i 245 CV: 43.500 euros
335i 306 CV: 52.500 euros
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